Hay veces que es mejor estar callado

por jordi wrangler Jue Jun 11, 2009 12:28 am

Esta mañana estaba en la fila del supermercado, cuando una rubia escultural me saluda agitando la mano, y me lanza una de aquellas sonrisas estremecedoras.

Yo que no me lo creia empiezo a mirar hacia todos los lados, hasta que quedó claro que el saludo era para mi.
Decidido, dejé la fila y me acerque a ese pivón.

Con la voz temblorosa le dije:

- Disculpe... ¿nos conocemos?

Ella me responde con una sonrisa encantadora:

-Pues... tal vez yo esté equivocada, pero me parece que usted es el padre de uno de mis niños.

Me quedé boquiabierto, mientras mi memoria trabajaba gran velocidad, intentando recordar los detalles de la única vez que le fue infiel a mi esposa.

Extrañado le dije:

-¡Ohh! no me diga que usted es aquella stripper que en la despedida de soltero de mi amigo, yo me la comí encima de la mesa de billar, en medio de aquella tremenda orgía, completamente borracho, mientras una de sus amigas me flagelaba comiéndome los huevos y metiéndose un pepino por el culo.

-Bueno... no exactamente, me dijo ella visiblemente avergonzada.Yo soy la nueva profesora de su hija...
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